No crea que la piel grasa tampoco necesita este cuidado, porque lo necesita. El aceite de la piel no significa hidratación.
La piel debilitada hasta este punto, puede desarrollar enfermedades como eccema, dermatitis atópica e incluso rosácea. Puede evolucionar con prurito y agravarse con enfermedades eccematosas, que pueden generar abrasiones en la piel. Esto, a su vez, favorece la entrada de bacterias y hongos, y puede generar infecciones cutáneas.
Los baños calientes también son muy dañinos para la piel, ya que destruyen la barrera cutánea de la piel. Basta pensar que en invierno son mucho más largos y cálidos, lo que no ayuda en nada a nuestra piel.
Al hidratar tu piel, además de prevenir todo esto, sentirás tu piel más firme e incluso con menos celulitis. Tu piel es más bella y menos opaca.
Para prevenir todos estos problemas de la piel en el invierno, te damos algunos consejos: baja la temperatura del agua en el baño para no dañar y ayudar a mantener tu piel sana, usa un poco de jabón y prefiere siempre el líquido al sólido y deja que la crema hidratante actúa sobre la piel húmeda al final del baño, porque funcionará mejor en tu piel.
Descubre nuestra gama de cremas hidratantes y encuentra la que mejor se adapta a tu tipo de piel. No dejes tu piel irritada y mantenla bella y saludable todo el año.